Alma Mater (capitulo uno -parte1)

Llegué al campus universitario, ¨la cuna de las ideas¨. Jovenes por todos lados; chicas muy guapas, sobre todo americanas -gringas-. Era un gran día soleado, el pasto tán verde denotaba que era ¨organico¨(1). Las cabelleras de los estudiantes refulgían, brillaban doradas con el sol. Todos parecían tener prisa. Pero al margen de los pasillos, en los verdes prados de la Universidad, algunos estudiantes, casi ajenos al ajetreo, fumaban marihuana formando circulos de grupos de tres, cinco, y hasta diez personas, tumbados en los extensos prados del campus. Otros hacían ejercicio o trotaban. Venían corriendo, y los perseguían pequeñas esferas -algunas luminosas y ruidosas-,o aves de juguete, o con formas de naves espaciales; estos ¨perseguidores¨ eran el nuevo juguetito de los todos los jóvenes(2).

En la invitación se leía, después de las presentaciones y los registros de rigor: ¨...el Dr. Pablo Herrera es uno de los mas importantes investigadores en el área de Antropología e Historia de la FITE.(3) Dará una conferencia hoy a las 14:00 Hrs. En el auditorio ¨H3-A¨ de esta máxima casa de estudios. El antropólogo Pablo Herrera hablará del nuevo proyecto internacional del que el forma parte. Un proyecto de redes y grupos de elite en la investigación, especializado en la zona de México y Centro América¨. -Recordé con cierta malicia que Pablo Herrera había realizado la mayor parte de sus investigaciones en Europa y Asia- ¨El Dr. Herrera ha sido invitado al proyecto UNO, que estudiara el ultimo siglo en función a los movimientos sociales de América Latina¨. -Sín embargo,a decir verdad, y para beneficio del proyecto, América Latina es uno de sus temas favoritos- reflexioné-; aunque otra de sus especialidades es el estudio de la migración en Europa.Algo es seguro, este señor es un experto en migración, y nació en México, y vivió mucho tiempo aquí. Supongo que su principal labor será contribuir con un enfoque latinoamericano.

En una cafetería de la zona estudiantil, se encontraba Elisa, que trabajaba en el cuerpo académico como asistente de coordinación. Sin duda era atractiva, muy inteligente, con una chispa de audacia mezclada con cierta sensibilidad artística; pero con un carácter impositivo y autoritario, a veces casi era una bruja mandona. Se veía a sus veintisiete años tan joven y guapa, que era más bien un placer casí masoquista -además de una señal de buen tino- seguir sus ordenes. Yo la conocí cuando recién entró al consejo académico, recomendada -por un Tío mio-. Era algo tímida entonces, aunque brillante; con el tiempo desarrollo un carácter acorde a sus funciones académicas. Era mucho más segura de si misma ahora, mas enérgica, la viva imagen de una coordinadora universitaría de alto perfíl, eficiente y a prueba de todo. Me gustaba esta Elisa, con rostro de niña y actitud de sargento. Por que a pesar de su cargo y sus funciones, nunca olvidaba que éramos amigos.

La salude, y le expuse brevemente mi interés en el proyecto al que pertenecía Pablo Herrera, de quién me declaré admirador. Me comentó que era un gran proyecto, y que de hecho el mismo Herrera buscaba colaboradores en la Universidad. No pude contenerme y le pedí encarecidamente que me recomendara, que yo llenaba el perfil solicitado, y que sabía bien que yo era de confianza. Me dijo que haría lo posible, tomó un sorbó de café, revisó la hora, y me guiñó el ojo-la Elisa joven y casual apareció por un instante-.
–No te preocupes. Acompañame, te presentare con Herrera, estoy segura que congeniaran muy bien.
-Perfecto.
-Sabía que desde ese momento yo ya estaba dentro. Me lo había ganado a pulso, no era un vil acto de nepotismo. Por otro lado no apelé al hecho de que fue un tío mio -mi pariente- quién la recomendó a ella. A pesar de que el padre de Elisa perteneció a esta Universidad y fue un hombre reconocido, ya había muerto cuando ella solicito entrar a trabajar aquí después de terminados sus estudios. Aquí los muertos no pesan, y favor con favor se paga.

Elisa, se levantó- pues tenía prisa- -¨Pide la cuenta nos tenemos que ir ya¨.
-¿Ya a la conferencia? – ¿dijo ¨tenemos¨?- -Espera, aun no he terminado...-me quejé-
- Pide una factura. Tenemos que ir por Herrera al Hotel. Te presentare como mi secretario.
-¿Yo tu secretario? ¡Vaya que el mundo da vueltas!
-Mi secretario a cargo del proyecto UNO; mi representante. Tu ocuparas mi lugar en dicho proyecto, eres mi hombre de confianza, mis ojos y mi voz en el proyecto.

Bien me decía esto, mientras salíamos a toda prisa de la cafetería atestada de estudiantes llenos de hormonas, con sus voces y sus acentos afectados, con sus conversaciones pretenciosas, con sus poses, sus ropas y sus modas; el espíritu juvenil se sentía en el aire. Yo mismo me sentía mas joven.
Apenas y me dio tiempo para registrar mi cuenta en el detector de pago, recoger la factura impresa y salir corriendo detrás de la incansable Elisa, como perrito faldero, como perseguidor –¨Follower- de forma humana. Se detuvo en la puerta para darme su máquina (4)
¨No tenemos mucho tiempo¨- Me decía con toda autoridad, y con un gesto de impaciencia. Este nuevo rol, de ella por arriba de mi, de jefa intransigente que no sabe de amistades no era ninguna bromita. Si, favor con favor se paga, pero a veces la vida te lleva a cambiar de posiciones y es ahí donde se exige el verdadero ¨pago¨, aquí no hay favores, ni contemplaciones; en realidad, esta era el dificil campo de batalla de las labores universitarias. Pones a los ¨tuyos¨, a tu grupo, pero debes dirigirlos bien, con mano de hierro.
Ahora lo veía claro, Elisa pretendía ocupar el espacio que su padre tenía en esta Universidad cuando el vivía. Todos estos años actuando de ¨mosquita muerta¨, de estudiante intachable y casi virginal, mustia incluso; y ahora se transmuta en una autoridad tiránica al frente de la fracción que su padre casi fundó solo; en una mujer de hierro -¿no su padre era Roberto ¨el Jefe¨Fernández, o ¨Jefernández¨? El chingón. Si, la vida da vueltas, pero hay quien con voluntad y por derecho propio lucha y consigue regresar a la vida que le esperaba al principio. Tumbaron al Jefe Fernández -hace años-, y ahora su hija, por lo visto, no iba a dejar que eso se quedara asi; venía por todas-.
Yo sentía que había entrado sin aviso en un viaje que iba a otra velocidad, a una velocidad enloquecida y ajena a mi placentera vida de catedrático e investigador. Yo ya era un satélite que giraba alrrededor de Elisa, la exigente coordinadora. Todo en segundos. Era por una buena causa.

- ¨Roberto avisa al chofer que estamos listos; esta aquí a la vuelta. Es un auto de la universidad de color verde, el especial. Yo voy a hacer una llamada.
- Ahora si parecía su ¨secetario¨. Era el costo por pertenecer a este nuevo proyecto. ¿Qué no podía enviarle una señal de aviso al chofer? ¿Cuánto me irían a pagar? Últimamente parecía que este asunto chupaba bastante presupuesto de la universidad.

Fuimos hasta el Hotel en reforma por el Dr. en Antropología; venía acompañado de dos personas más, americanos, parecían ser miembros de alto nivel, pero no hice preguntas. Elisa me presentó, y el Dr. Herrera me saludó con confianza, parece que ya le habían hablado de mi. Después permanecimos en silencio. El protocolo, sus actitudes y su ropa indicaban que efectivamente se trataba de personalidades de un alto nivel.
El tráfico era terrible; así que los invitados aceptaron una copa de vino de máxima calidad (5). El Dr. Herrera se sintió más en confianza y comentó en inglés:
-El gran problema de las mega-orbes latinoamericanas, el tráfico. No logramos restringir las vías rápidas solo para los usuarios registrados(6) En el fondo creemos que los caminos son para todos. Es más democrático que todos circulen por ellos. Pero ya ven ustedes los resultados, esta es tierra de nadie, una jungla de autos y gente de todo tipo¨.
Los gringos asintieron con un rostro solemne, pero con cierto pasmo al observar el mar de autos alrededor, y la cantidad de gente sin empleo en cada esquina, caminando como fantasmas hambrientos. Mientras nosotros los revasabamos a toda prisa
- y se supone que nosotros hablamos por ellos y los representabamos, pobres-

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1.- Pasto Organico: Pasto géneticamente creado. El adjetivo organico señala que se trata de algo que ha sido alterado géneticamente, un fruto, un arból, o un ser humano en los paises donde esto último es permitido.

2.- Se refiere a Seguidores, o Followers, gadgets ¨herramientas¨de diversas formas (aves, dragones, personajes de caricaturas o simples esferas) que siguén a su usuario con fínes determinados: de ocio, en una carrera puede medir velocidad, tiempo, ritmo cardiaco etc. De comunicación. Puede señalar cualquier problema en el ¨espacio de convivencia¨, puede alertar de algún posible ataque nuclear, o de otro tipo. De carga,algunos Followers pueden cargar con un peso no muy mayor, abasteciendo al usario de mascaras y protección en caso de una contingencia.

3.-FITE: Siglas de la Federación Internacional de Tecnológia y Educación.

4.-Maquina : Microcomputador.

5.-Producto de Máxima Calidad: productos de consumo genéticamente alterados para presentar los atributos necesarios para esta etiqueta.

6.- Registro. El registro es el medio por el cual un ciudadano adquiere servicios de primera calidad. Se calcula que solo el 30% de la población mundial accede a este status y goza de los beneficios de estos servicios; aunque son cifras alteradas para dar una imagen positiva del sistema de satus.